lunes, 28 de noviembre de 2011

Una vez la luna….

Una vez la luna
de tan inmensa
se cayó en el horizonte…
El mar se tiñó de nácar…
La marea comenzó a navegarme…
Mientras avanzaba,
en las crestas de las olas
las sirenas hechizadas,
melodías de Edith Piaf entonaban…
Los niños con sus castillos
desde la playa observaban …
Un crucero quedó en tinieblas…
Miles de barcazas
en estrellas remontaban…
Pequeños botecitos
en su centellear guiaban…
Atraídos por el espectáculo
miles de “nadies”,
de brazos en alto
y paso seguro
con pigmentos en las paletas,
se acercaban…
Los “che” no entendían…
Pero al ver los colores
arriesgaron un sueño…
Se dieron las manos,
abrazaron la mar,
besaron las playas…
Los castillos, cedieron…
Blancas palomas
los aires surcaron…
Florecieron los campos
Compartieron dulzuras
Se poblaron escuelas…

“Baila, baila la danza de la fortuna,
Baila, baila en el cielo de primavera
El viento, convirtiendo las hojas de los bosques”


Siempre oportuna,
en ese momento,
nació otra luna.


Imagen: Silvia Massimino
http://angelesdebarro.blogspot.com/

Edith Piaf
, "El gorrión de París", 1915-1963

9 comentarios:

  1. muy bonito.
    cada vez mejor.

    ResponderEliminar
  2. Una producción colectiva, me imagino a los ches pintando un cuadro con música de fondo de "el gorrión de París" muy bello el "garabatito" de hoy. Beso Isa

    ResponderEliminar
  3. Daniel, Claudio, Isa, GRACIAS

    Isa, los "che" pintando un cuadro con música de fondo de "La Piaf" y "los nadies" incursionando en el "mundo del arte, o de la ciencia, o..."
    Me acordé de la chica que tocaba el violín -no fue alumna mía- que terminó como abanderada... la encontré un día cerca de la Facu, estaba estudiando Farmacia... Cómo me emocioné!!!! Vale la pena!!!!!

    ResponderEliminar
  4. Llega... llega profundo y se mezclan los colores con las olas que abrazan esa otra luna.

    ResponderEliminar
  5. Hermoso Hilda, tu recuerdo del encuentro con ex alumnos luego de varios años me hizo recordar situaciones vividas similares. Son extraordinarios esos afectos compartidos o en una sola dirección cuando se expresan sin los condicionamientos del aula. Es muy grato y son la savia de la profesión o del quehacer como sea. Siempre lo vi más como lo último que como lo primero ¿Carrera docente? Puaj.

    ResponderEliminar
  6. Roberto, Profe, muchas gracias.

    Con respecto a esa exalumna... es una de las situaciones que conmueven. Cuando empezó primer año, su situación socioeconómica era de marginación total. Al hablar de su entorno, puedo decir que una villa era a su vivienda como "Las Cañitas" a la mía. En la época de Ibarra, en uno de los Proyectos para chicos carenciados, se comenzó a enseñar música. Ella optó por violín, al poco tiempo se integró a una orquesta barrial en el mismo Proyecto. En la escuela siempre fue muy buena alumna hasta ser la abanderada en quinto y sexto año. Verla que está cursando una carrera universitaria es una sensación de plenitud inconmensurable... Pensar que en la fiesta de ese fin de curso, la vicedirectora me dijo A MI: "Que esta chica sea abanderada habla del bajo nivel que estamos teniendo" (puajjjjj)
    No te miento profe, hay gente que cobra el sueldo y le falta el respeto a sus alumnos porque son pobres, desnutriditos, mal vestidos... Qué lacra social!!!
    Una pequeña historia de satisfacción personal. Esta chica no pasó por mis aulas pero es lo mismo.

    ResponderEliminar
  7. Se que no mentí y ni siquiera exagerás, yo mismo he pasado por las mismas situaciones más de una vez. No todos los docentes son como tu vice pero si hay muchos que lo son no es un comentario raro de escuchar. Cómo podría ser de otro modo, la escuela es como el afuera de la escuela. Por eso cuando escucho "hemos ganado la batalla cultural" o me enojo o me sonrío dependiendo del humor que tenga ese día.

    ResponderEliminar
  8. Hermoso. Me gusta y cuando decís que los che no entendían y que arriesgaron un sueño, porque el sueño da la posibilidad de cambio. Que sensibilidad. Abrazo Estela Z

    ResponderEliminar